martes, 29 de enero de 2008

CARLA, LA OTRA


No lo puedo evitar: soy súper pro Carla Bruni. Cecile me parece una estirada gabacha. Carla es más glamourosa, por eso puede ser tan estirada o más. Ya cuando cantaba aquello de QUELQU'UN M'A DIT, me parecía una mujer fascinante, y de hecho lo sigue siendo. El torete que ahora se calza, es decir, el húngaro que manda en gabachilandia ha relanzado una carrera más bien en declive. Carla se veía abocada al underground culturipóllico, pero minoritario: y, chica, las minorías mucha pasta no dejan. Total, que el otro día, viendo la tele (sí, los modernos vemos la tele también) aparece un anuncio de un coche (qué horror!!!) del que sale Carla cantando BANG BANG MY BABY SHOT ME DOWN. El anuncio es para matar al publicista, salvo por la banda sonora y lo guapa que saca a Carla. Estupenda versión del tema compuesto por Sonny para Cher, aunque quizá lo que hace Carla se parezca más a la versión de Nancy Sinatra. El tema me ha encandilado, hasta el punto de que ya me lo estoy bajando del amule. Realmente de toda esta historia, hay una gran ganadora: Carla. Zarko no deja de ser un cincuentón horterilla y ridículo, de esos que recién divorciados son capaces de cualquier ridiculez que a sus ojos les haga verse más jóvenes; y la pobre Cecile, muy digna, pero dejada en evidencia por el Presidente de la Ridipública Gabacha ante los ojos de toda Europa. Carla, guapa, ya tienes otro fan en mí.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tienes razón.Es lista, la tía. Y musicalmente me gusta mucho. Y es muy guapa,a sus 40.

Él me parece el primer Jefe de Estado Francés que puede presumir de avergonzar a su país con una actitud absurdamente americanada que no le pega nada al Presidente de la República= una mamarrachois

Anónimo dijo...

De acuerdo en casi todo lo que escribes: la canción,lo más, el anuncio, lo menos (y hay que ver la versión escrita, fatal!), Sarko, un rididulín... pero ella (sí, muy guapa), ella no merece en nada mi admiración; este rollo de amor decimonónico que puede con todo y con todos, que a los dos meses ya se hayan jurado amor eterno, y que tengan que hacernos partícipes a todos de sus arrumacos y carantoñas de quinceañeros por entre las piedras de Egipto (si Hatshepshut levantara la cabeza), me parece lo peor por parte de ambos.. Esto va a durar dos telediarios, y si no, al tiempo.